lunes, 12 de marzo de 2012

Infant voice into your throat

William Claxton    
Me encantan las canciones que dicen "Woah, Woah-oh" son divertidas.
Bueno, ya está, se acabó. Lo hecho, hecho está, bien o mal, pero se terminó. Me quedan unas horas para recoger lo que serán mis últimos trabajos (sin contar que igual me hacen repetir algunos y se jode todo)

Llevo unos días que no quepo de gozo en mi. ¡Me salgo! Paso de estreses y agobios a perderme en mi propia sonrisa. Es un poco extraña esta sensación, aunque me suena haberla sentido antes, ya no me acordaba de cómo era exactamente.

Siempre había pensado que llegados al punto en el que me encuentro, tendría miedo, mucho miedo. Ya lo tuve una vez, pero era inseguridad y capricho.Y ahora me encuentro con fuerzas para enfrentarme a lo que se me ponga por delante, tengo muchas ganas de enfrentarme a todos los fantasmas que me esperan por las noches en la puerta de mi habitación. Es inevitable que a veces mi mente viaje sola por algunos rincones oscuros, pero mientras recupere el camino correcto, todo estará controlado.

Sinceramente, he pasado dos de los mejores años de mi vida, aunque tampoco es que haya pasado por muchas cosas, pero todo este tiempo ha sido muy importante para mi, porque nunca un curso me había cambiado tanto la vida, ni a mi misma. No soy, para nada, la misma persona que cuando entré, porque me llevo un poco de cada día que he ido al instituto, de cada persona que ha estado conmigo... y realmente siento pena por tener que acabar. 
Como es natural, no seguiré manteniendo el contacto con muchos, me cabrán en una mano las personas que me llevaré conmigo, pero esas personas son muy muy geniales, y si me las llevo es porque han conseguido hacerse un hueco en mi, de una manera o de otra.
Ai, que me pongo ñoña. 

En esta temporada de no salir de casa, y máxima locura de trabajos y exámenes, han habido cosas que he echado de menos, pero han habido algunas otras que la verdad es que no. Ahora quisiera recuperar algunas, como tardes de cotilleos femeninos, con comidas en el burger, y meriendas en Antique con mi guarrona

Hoy he soñado, pero de lo único que me acuerdo es de sonreir, gritar, porque estaba en un lugar rodeada de verde, y caía agua. Me ha gustado mucho !

Bueno, ahora viene otra temporada de desaparecer... fallas! los que lo quieran verme tienen mi móvil. ^.-
Una cosa guay de las fallas son los churros, en cada esquina hay una churrería. Ayer merendé los mejores churros que he comido nunca, porque son detalles que hacen que los ingredientes sean mucho más especiales. Estas noches estoy durmiendo como una niña pequeña, porque las noches se han convertido en momentos especiales en los que cualquier cosa puede pasar.
Cerrar los ojos bajo una manta de cuadros y lunas no llenas, abrirlos y ver a través del parabrisas el degradado más dulce que ha existido. 
Gracias. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario