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| Гладиш Юрій |
No me esperaba que esto fuera a sentarme así, no me esperaba que mi subconsciente reaccionara así. No sabía que ésta noche haría la croqueta como si no hubiera un mañana (¿que irónico que cenara croquetas de jamón no?)
Opino que las despedidas... sobretodo las menos formales y tajantes, deberían ser con sexo. Pero bueno, eso es una opinión personal que no todo el mundo debe compartir...
Cada persona saca una parte de ti nueva, como que descubre una nueva costilla escondida... entonces esa persona pasa a ser especial. Quizá me descubrió el vino, o diferente alergia a los perros, la espontaneidad de la noche, la sinceridad de los ojos claros como excepción, la parte sexy de los cigarros, esa risilla con la lengua pegada a los dientes, la mueca del nerviosismo justo antes o después de alborotarse el pelo... curiosidad repentina. Es dulce la singularidad de las personas, lo que hace a cada persona ser distinta...y a la vez te salen cosas distintas, por ejemplo... no pude comer comida basura con él, sólo comida de persona normal...
Esto no es una despedida, o si? Si, creo que si... porque ya nada será igual. Decimos adiós a una parte de nosotros que ahora se tendrá que cohibir, ocultarse, y encerrar bajo llave.
Ai jo. No esperaba que fuera a sentirme tan triste.
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