lunes, 16 de abril de 2012

Midnight Run


Glenda Garza
Al menos un día a la semana siento que las personas tienen un "algo" que les hace ser racionales, ser especiales, que les diferencian de los animales, que se desmarcan unos de otros... siento que vale la pena conocer, sentir y no ser robots. Al menos un día a la semana.
No es misantropía, es indiferencia.
Y de verdad me pregunto si encontraré a más de tres personas que me parezcan lo suficientemente fantásticas, increibles, y con tanto valor como para envolverlas en oro y prometerles mi hombro para siempre.

Son simples bolsas en mi armario lo que me recuerdan que una vez hubo un obstáculo en lo que hoy es viento, que no siempre fue materia sino abstracción al corazón. Que en mis archivos existieron momentos que hoy son dejavús en mis actos. Y una vez dije "será por tiempo" y de repente el tiempo se acabó. Fue lo único que fui capaz de ver venir, me adelanté a mis propias palabras con mis actos, hoy experiencias vitales; a continuación me desperté en otra ciudad, con pañuelos arrugados, siendo otra persona sin más propósito que el de caminar hacia delante, aparentamente acompañada cuando realmente era sola, irónicamente al revés de como suele ser.
Gracias a ello hoy me levanto entre sábanas de lo imposible, habitación del recuerdo de fantasías, espejo con reflejo de lo que siempre quise ser, independientemente enamorada.
No es dolor, no es rencor, no es furia, no es venganza, no es nostalgia sino confusión, de por qué otros si, y yo no, por qué tú sí, y yo no.


Quiero decirte buenas noches todas las noches, quiero decirte buenos días todos los días, que aproveche en todas tus comidas, hasta que te vayas...
Te dije que algún día estaríamos juntos, y no fue con el éxtasis de cariño, ni por el calor de tu piel con la mia... fue porque lo sé, porque mis ojos se cruzan con los tuyos aunque estén cerrados, mis pasos van acordes con los tuyos, aunque no por el mismo camino, y ha sido así desde que cruzamos las primeras sonrisas y decidimos vivir aventuras a través de lentes, con la ISO alta, y complejo de murciélagos a altas horas de la noche.
Fuiste mi protagonista entre historias paralelas, hoy hacemos el prólogo de la nuestra, y algún día la comenzaremos.


Y ahora que tengo el empujón tengo que aprovecharlo, me tengo que esforzar al máximo si no quiero quedarme atrás, ni defraudar a nadie.


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