miércoles, 22 de febrero de 2012

Believe

Momentos Elena
Los momentos conocidos como tal son los cuales Elena goza de máxima felicidad y emoción peliculera, máximo apoteosis mental. Son simples detalles que hacen que todo cobre y carezca de sentido; que el presente cobre el sentido y el exterior de mi espacio vital se anule totalmente. Es muy fácil conseguir un "momento elena", solamente tienes que dejarte llevar, sentir, y vivir de verdad.
Éste ha sido uno de los descubrimientos de la noche, han habido más, la verdad.

Ha sido la noche de describir sentimientos. Es algo que yo hago cada noche en éste blog, pero decirlo cara a cara, intentando que la otra persona comprenda tus palabras y pueda imaginar tus sentimientos, es dificil, pero se ha hecho fácil. Comprensión por parte de la otra persona se agradece, es algo que no es fácil de encontrar.
Sinceramente, llega un punto en el que yo dejo de creer en mis propias ideas, porque las de los demás tienen más voz que las mias, es algo que no se debe permitir, pero prefiero callar, antes de que me destruyan totalmente, pero menos mal que encuentro personas que comparten esas ideas, ya me empezaba a sentir un poco sola y loca... buf!! no perderme es muy importante, y mientras sigan existiendo personas, aunque en peligro de extinción, que piensen como yo, seguiré sintiéndome yo.

Si no me valoro a mi misma, nadie lo va a hacer más que yo. Y todo empieza por saber lo que yo necesito y deseo/sueño con tener y saber si lo podré o no tener.
En el momento que llegue a casa y me espere un cuarto de baño con velas y agüita con espuma, sabré que mi presente es el que mi mapa indicaba como correcto.
Las nubes están encantadas de saludarme cada noche, me preguntan por qué he tardado tanto en visitarlas, y cuánto más les rondaré, pero mis respuestas son duras, y sé que no por mucho tiempo, porque cuesta encontrar escalera tan alta que me haga llegar hasta llegar a ellas, y ese privilegio se ha de pagar caro, y mi sitio está allá abajo. Si la escalera no me permite bajar, tendré que lanzarme yo, y el golpe será duro, pero sé dónde está la realidad, y cuál es mi sitio.
Sentirme protegidas entre ellas, cómoda, feliz, es pura mágia, pero es una simple escapatoria de mi realidad, no durará siempre. Si quiero que mi realidad me haga sentir protegida, cómoda y feliz, me lo tengo que currar, con escalera o sin ella, pero bajando a la tierra.
Pero siempre les digo que no lloren, que me siguen teniendo ahi para llorar juntas, aunque halla distancia.
Todo es quererlo, convertir "poder" en "querer"

Que optimista no? :)


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