 |
| Ira Chernova |
Quizá somos dos gotas de sal haciendo carreras por el asfalto de tu dermis, a ver cual llegará antes, cual morirá antes, cual dolerás más. Dos kamikaces buscando la salida fácil a lo que ya no encuentran sentido. Un sin amar, un sin oler ni sentir. Andar descalzos por cenizas, entre niebla en un charco, sólo tus dos iris sirven de guía en esta atmósfera frágil. Dame la mano una vez más, pon tu oído cerca para gritarte con fuerza mis sentimientos, ya que frente a frente no me escuchas. Si te digo vuelve y tú te vas... si te digo que te alejes de mi, entonces, ¿volverás? Dime entonces las palabras mágicas, esas que hagan tilín en tu sensibilidad. ¿Dónde está la correa que te aferre a mi cintura, cuál es el baile que te hipnotice cual cobra peligrosa a mi son?
Quizá no andemos al mismo ritmo, ni nuestro corazón palpite con la misma intensidad, un día tu querrías pelear contra dragones por mi, que al otro soy yo la que trepa castillos para encontrarte, por eso celebremos el día que los dos nos reunamos, ya que será importante la fecha en la que podamos ser sinceros con nosotros mismos.
Lo ponemos difícil, cierto?
Pero nunca hay que dejar de luchar, ni de moverse por lo que uno quiere, siempre estamos a tiempo de equivocarnos, recuperar lo que es nuestro si creemos que lo es. Dime que eres mio y me llevas dentro todos los días que sean necesarios, hasta que nos encontremos caminando sobre la misma línea.
No hay comentarios:
Publicar un comentario